Lorena Formoso: un camino lleno de sueños

Lorena Formoso sabe lo que es perseguir sus sueños. Ella misma lo hizo cuando tenía 38 años. Dejó su trabajo en un prestigioso despacho de abogados como financiera y se decidió a emprender. Esta gallega afincada en Madrid aún recordaba con nostalgia los sobrantes de tela que le pedía a su abuela para vestir a sus muñecas. De esos dulces recuerdos de infancia, cuando los carnavales convertían la cocina de su madre en un auténtico taller de costura, nació su vocación.

Por eso, se matriculó en diseño de moda en la Institución Artística de Enseñanza de Madrid (IADE). Comenzó sus primeros bocetos en la mejor compañía: con sus amigas y conocidas a las que les confeccionó vestidos de fiesta en el pequeño taller gallego de su gran amiga Carmen.

Pero el flechazo de Lorena Formoso con el mundo ‘bridal’ se produjo en una jornada especialmente emocionante para la diseñadora: el día que su hermana se casó y ella decidió hacerle su vestido de novia. Desde entonces, esta creadora no ha parado de recibir encargos, haciéndose un hueco propio en el mundo de la moda nupcial.